El mundo de las redes sociales ha sido testigo de un movimiento inesperado: Jack Dorsey, una de las figuras más emblemáticas del sector, ha decidido cerrar su cuenta en Instagram. Pero, ¿qué lleva a un pionero de la tecnología a tomar tal decisión?
El adiós de un pionero
Jack Dorsey, conocido por ser el co-fundador y ex CEO de Twitter y actual líder de Block, ha sorprendido al mundo digital al eliminar su cuenta de Instagram, donde ostentaba el deseado nombre de usuario «@jack». Estos nombres, simples y directos, son una rareza en el mundo de las redes y su valor puede alcanzar cifras astronómicas en el mercado secundario.
A través de Nostr, una innovadora plataforma de redes sociales descentralizada, Dorsey compartió las razones detrás de su decisión. A pesar de ser uno de los primeros usuarios de Instagram y de haber invertido en sus primeras etapas, había dejado de usar la plataforma hace años. Su relación con Kevin Systrom, co-fundador de Instagram, se remonta a los días en que Systrom era pasante en Odeo, una empresa que eventualmente daría origen a Twitter.
La sombra de una venta millonaria
Uno de los puntos de inflexión para Dorsey fue la venta de Instagram a Facebook (hoy conocido como Meta). Tras este evento, Dorsey dejó de publicar en la plataforma, sintiéndose herido por no haber sido informado directamente por Systrom sobre la venta. Su última publicación data del 9 de abril de 2012, y desde entonces, su perfil ha permanecido inactivo.
La decisión de Dorsey cobra especial relevancia en el contexto actual, donde Instagram y Twitter compiten ferozmente en el mercado de las redes sociales. A pesar de su vínculo con Twitter, Dorsey ha mostrado interés en otras redes que podrían considerarse competencia. Ha apoyado proyectos como Bluesky y ha donado a Nostr, demostrando su compromiso con la innovación y la descentralización en el mundo digital.
Más allá de las razones personales y profesionales, la partida de Dorsey de Instagram nos lleva a reflexionar sobre la efímera naturaleza de las redes sociales y cómo, incluso para sus protagonistas, pueden perder relevancia con el tiempo. El futuro del nombre de usuario «@jack» en Instagram es incierto, pero lo que es seguro es que su disponibilidad generará expectación y especulación en el mundo digital (de momento Instagram informa que la cuenta no existe, pero tampoco permite su uso).
